Entre los problemas sociales que se presentan y que afectan la salud mental, se identifica el maltrato de las personas mayores, el cual influye directamente en las emociones del adulto mayor y de sus cuidadores, este es un problema que no se notifica en todo el mundo, y por tal razón pasa desapercibido ante las estadísticas locales y mundiales.
A pesar de no tener clara la magnitud del maltrato en esta población, se observa que es un evento de relevancia social y moral ante las acciones que se realicen, se requiere una intervención interinstitucional y una respuesta efectiva en todos los entornos que estén dirigidas a proteger los derechos de las personas mayores.
Las siguientes son manifestaciones que pueden presentarse en los adultos mayores y que pueden ser indicios de que se está presentando maltrato:
- Pérdida del disfrute de actividades cotidianas.
- Descuido en la presentación personal: ropa sucia, abandonar hábitos de aseo.
- Inadecuada higiene del sueño.
- Alteración de los hábitos de alimentación.
- Pérdida de peso significativa.
- Aislamiento o retraimiento.
- Agitación, agresividad o conducta violenta inusual.
- Signos externos de heridas inusuales: moretones, quemaduras, cicatrices.
- Señales físicas de haber sido castigado, por ejemplo, marcos o lentes rotos.
- Lesiones físicas por presión, como úlceras u otras afecciones prevenibles.
- No tiene o se le niega el uso de dispositivos de ayuda, como andadores, audífonos, dentadura postiza, medicamentos, entre otros.
- Vive en condiciones peligrosas, inseguras o sucias.
- Muestra indicios de cuidados insuficientes o no pago de obligaciones financieras a pesar de tener recursos necesarios.
El maltrato y el abuso pueden traer consecuencias a largo plazo, tanto para el adulto mayor que lo vive como para sus cuidadores:
- Muerte prematura.
- Alteración emocional.
- Deterioro de la salud física.
- Deterioro de los vínculos personales y familiares.
- Pérdidas económicas y de patrimonio.
- Temores inexplicables.
- Depresión.
- Sentimientos de culpa.
Para prevenir estas situaciones se busca fortalecer las redes de apoyo en los diferentes entornos en los que los adultos mayores tienen participación: la familia, instituciones, empresas.