La Estrategia Abrazando Familias de la Alcaldía de Rionegro y la Empresa de Desarrollo Sostenible del Oriente, EDESO, presentaron a la comunidad un informe de avance de la obra MAKIA: Centro Integral de Atención Diferencial, con el anuncio de que corridos ocho meses desde que se empezó la construcción, la estructura madre está al 100 % y se avanza a muy buen ritmo en las labores de obra gris y obra blanca. El equipo técnico informó que, según el cronograma, y si el clima continúa seco, la obra estará lista para finales del mes de septiembre.

MAKIA —Centro Integral de Atención Diferencial— es un programa de la Estrategia Abrazando Familias que llega para evolucionar la manera como se atiende la discapacidad en el Oriente antioqueño, desde un enfoque multidisciplinar e integrando a la familia en los servicios y de esta manera aportar también a la economía del cuidado.

El alcalde Rodrigo Hernández Alzate informó que una vez terminada la obra se pasará a la dotación, con todos los elementos necesarios para ofrecer los diferentes servicios con las mejores condiciones. Para esta labor hay destinados 1.800 millones de pesos, con aporte de 1.300 millones por parte de la Gobernación de Antioquia, a través de la Secretaría de Familia e Inclusión del Departamento, y 500 millones de recursos propios de la Alcaldía de Rionegro.

A la reunión asistieron líderes comunitarios de los barrios vecinos de MAKIA, el Comité Ciudadano de Obra, miembros del Comité Municipal de Discapacidad, autoridades municipales, padres de familia de UAI/MAKIA, medios de comunicación y otras personas de la comunidad que se han interesado en el tema. EDESO, que lidera el proceso de construcción de la infraestructura, presentó tanto el informe técnico como los de gestión social y ambiental, indicando que se han presentado cero accidentes en la obra, y se cuenta con diversos programas de cuidado del ambiente, con participación comprometida de la comunidad.

Los jóvenes del nivel socio-empresarial de UAI/MAKIA, quienes reciben formación para proyectarse al mundo laboral, prepararon en su taller de gastronomía el refrigerio, que compartieron con todos los asistentes. Por su parte, el grupo de mujeres sordas dieron a MAKIA su seña para la lengua de Señas Colombiana, y que suma la expresión de estructura y la expresión de familia, y con el movimiento representa a esa estructura abrazando esa familia.